sábado, 17 de septiembre de 2011

Historiando cantares - Media hora de suerte

Hola amigos.
Dejamos aquí otro "Historiando cantares". En esta oportunidad "Media hora de suerte" (subtitulado "El Albardón"), chamamé de Constante Aguer y Tránsito Cocomarola, que fuera grabado el 21 de julio del año 1949 por el "Trío Cocomarola" con la voz solista del entrerriano José Cejas (José Amaranto Carnero, 1919-2009).
La información que se tomó como base fueron los valiosos datos aportados por el Prof. Enrique Piñeyro quien tuvo la gentileza de brindarme su manuscrito inédito. También se consultó el libro de Roberto Gutiérrez Miglio titulado "Quevedo - Maidana y su conjunto correntino en el mundo del chamamé" (Ed. El Reino Guaraní, año 2007).
Asimismo, el relato está de alguna forma "enriquecido" con los testimonios de personas muy allegadas al lugar que le dió nombre a este chamamé, así como del aporte de fotografías actuales proporcionadas por Delia Lugo, quien además tuvo la gentileza de entrevistar a doña Rosa García de Gómez, la nuera del matrimonio formado por doña "Pepa" y don Julián que fuera dueño del local y los cuales son nombrados en la letra creada por Constante Aguer.
Aprovecho para saludar a don Enrique Piñeyro en el "Día del Profesor", y agradezco sus elogios para con "Nostalgias de mi Litoral".
Espero que les guste.
Hasta la próxima.
Pablo



Tránsito Cocomarola con el dúo de José Cejas y Juan Alberto Ledesma. Año 1947 (Fotografía proporcionada por Walter Magnelli).


El chamamé "Media hora de suerte"

El 21 de julio de 1949, el "Trío Cocomarola", integrado por Tránsito Cocomarola en bandoneón, y el dúo José Cejas y Manuel Gómez en voces y guitarras (1), llevó al disco el chamamé titulado "Media hora de suerte", subtitulado "El Albardón" (Discografía Completa EMI-Odeón Vol. 2 - Años 1946-1949) y que fue cantado por el solista José Cejas, seudónimo de José Amaranto Carnero. Si bien la letra de Constante Aguer se refiere a una desventura amorosa, este chamamé lleva el nombre que tenía un local que funcionaba como bar, restaurante y almacén, ubicado en la esquina de las calles Bolívar y Uruguay, en la ciudad de Corrientes y que funcionara comercialmente entre las décadas del 40' y del '70. Este local tuvo por nombre "Media Hora de Suerte".


Doña "Rosita" García de Gómez, nuera del matrimonio dueño del bar "Media Hora de Suerte" (Fotografía de Delia Lugo).


Los dueños del bar "Media Hora de Suerte"

¿Quiénes fueron los primeros dueños del bar "Media Hora de Suerte"? La Sra. Rosa García de Gómez -doña "Rosita"- nuera del matrimonio que fuera dueño del local, brinda el siguiente testimonio. "Los dueños eran Josefa Rodríguez -doña "Pepa" llamada por los concurrentes- y don Julián González. La señora se había casado en segundas nupcias con don Julián y entre ambos habían puesto el Restaurant y Almacén de Ramos Generales "Media Hora de Suerte". A su vez, doña "Pepa" se había casado anteriormente con Abelardo Gómez con el que tuvo un hijo llamado Ernesto Argentino "Chino" Gómez que fue mi esposo y al cual conocí cuando yo contaba con 15 años. Doña "Pepa" y don Abelardo tenían almacenes de ramos generales en General Paz y cuando enviudó, doña "Pepa" -con sus 31 años- se casó con don Julián y fueron a vivir a la capital correntina donde pusieron "Media Hora de Suerte".

"Mi esposo -hijastro de Julián González- era chofer y había comprado un camión "a medias" con don Tránsito. Además, Cocomarola era muy amigo de él y de don Julián, hasta tal punto que cuando la esposa de don Tránsito -doña Anita Vidal- se enfermaba, yo les cuidaba a sus hijos "Coquimarola" y Nelly. Yo también trabajaba en el lugar, anotaba las mesas y sumaba las libretas, que en esa época era común que los clientes las tuvieran".


De izquierda a derecha y adelante: Josefa "Pepa" Rodríguez, una amiga, Rosa García de Gómez (nuera de "Pepa") y un señor de apellido Ruiz Díaz. Atrás: los dos señores desde la izquierda eran clientes que siempre iban al lugar, mientras que el de la derecha es un mozo (Fotografía del álbum familiar de Rosa García de Gómez).


Doña "Rosita" -que el 18 de julio cumplió 80 años- prosigue con su relato: "En este lugar se reunían músicos chamameceros como ser Eustaquio Miño (padre), Tránsito Cocomarola, Ernesto Montiel, Ubeda-Chávez, Salvador Miqueri, Verón-Palacios, entre otros. El local tenía un patio grandísimo donde tocaban los conjuntos y al funcionar también como restaurant, especialmente en los días de carrera en el Hipódromo de Corrientes y desde muy temprano, se hacían comidas como ser el mejor pescado frito, pollo al horno, "mbaÿpu" (polenta correntina), y donde el señor "Laicho" era el cocinero, un hombre oriundo de General Paz. El lugar permanecía abierto hasta altas horas a la madrugada". 


El nombre "Media Hora de Suerte"

¿Por qué el bar se llamó "Media Hora de Suerte"? El profesor Enrique Piñeyro lo explica en el siguiente relato.
"La denominación de "Media Hora de Suerte" proviene de las vivencias de los habitué a ese restaurante que fueron -en su mayoría- músicos y poetas chamameceros. Uno de ellos, don Alejandro Barrios, acordeonista, narra lo siguiente. "Media hora era el tiempo que duraban las actuaciones de los músicos chamameceros en LT7 "Radio Corrientes", ubicado a escasas cuadras del bar, en calle Ayacucho, hoy Hipólito Yrigoyen 2482, de esta ciudad. Los números en vivo con músicos, cantantes, conjuntos chamameceros, eran durante la mañana, de 8 a 12 y a la siesta de 14 a 18 hs. Los propietarios de la radio preferían en este tiempo, músicos correntinos que actuaran directamente. Cada media hora se desarrollaban programas musicales auspiciados por diversas casas comerciales de la ciudad capital, y en este tiempo podíamos actuar y ganar unos pesitos de lunes a sábados, y con "suerte" éramos convocados...El bar de don Julián era el lugar donde estábamos reunidos todos los acordeonistas, bandoneonistas, guitarreros, cantores...Nos avisaban con un "cadete" de la radio a quienes teníamos que tocar música, de tal hora a tal hora, y allí nos preparábamos, ensayábamos y nos poníamos de acuerdo para formar tríos, cuartetos...el repertorio y otros detalles. Luego nos aclara: "De allí viene que ser elegidos era nuestra "media hora de suerte" para actuar y hacernos conocer...allí anunciaban los bailes de "pistas" y clubes donde actuábamos los sábados y domingos de noche...A todos nos convenía estar en ese bar, era nuestra "posta" o parada para hacer "guardia" o esperar el llamado de la radio. Pasábamos todo el tiempo juntos los músicos amigos y nos conocíamos mejor...Allí pasábamos la mañana y la siesta...Comíamos y bebíamos...No faltaba ninguno de los músicos chamameceros y algunos tangueros. Entre audición y audición, a veces actuábamos dos o tres veces en el día...Formábamos distintos conjuntos, variando los músicos para que todos ganaran unos pesitos que siempre venían bien...Mi conjunto se llamaba "Trío San José", yo en acordeón y dos guitarras que nunca faltaban en el bar. Nos poníamos de acuerdo en el patio de don Julián, en el corredor de la casa...atrás en el patio...todo era muy lindo...todos nos ayudábamos con la música del chamamé..."


Tránsito Cocomarola y el chamamé "Media hora de suerte"

¿Por qué don Tránsito denominó "Media hora de suerte" a su chamamé? En su libro, Gutiérrez Miglio expresa que Tránsito Cocomarola denominó "Media hora de suerte" al chamamé que compuso porque él era uno de sus asiduos concurrentes. El patio del almacén (en el fondo) era lugar de reunión de músicos, poetas y cantores que charlaban y bebían. A partir de la tarde comenzaban las musiqueadas que duraban toda la noche, a la vez que se iba generando una corriente de amistad y camaradería chamamecera entre todos, que dejó una huella en la historia, que quedó inmortalizada en este chamamé.



De otros locales vecinos al bar "Media hora de suerte"

En el barrio Libertad, de la ciudad de Corrientes, estaba el Mercado "El Piso", ubicado en la calle Bolívar, entre Brasil y Roca, en la manzana comprendida por las calles Bolívar, Roca, Belgrano y Brasil. En la vereda de enfrente, en la esquina de Bolívar y Uruguay, estaba el bodegón "Media Hora de Suerte". Y en la diagonal al bar, sobre Bolívar, a pocos metros de Brasil, concretamente en Bolívar 2092, estaba el prostíbulo "La Esterlina", aún subsistente con destino a vivienda familiar. En tanto hacia el otro lado en Roca 1200 (casi esquina con Bolívar) frente al mercado, estaba la pista "El Rosedal", lugar de baile donde actuaban permanentemente los conjuntos chamameceros. El Sr. Zambrana -hijo del primer dueño de la pista- dice que "originalmente se llamó "El Descamisado" hacia el año '49, luego "El Rosedal" y posteriormente "Montecarlo". Además acota, "el primero que tocó en "El Rosedal" fue don Tránsito Cocomarola".



Actual esquina de Bolívar y Uruguay de la ciudad de Corrientes. Aquí estaba el local "Media Hora de Suerte" (Fotografía de Delia Lugo).


Inmueble ubicado en Bolívar 2092 (casi esquina Brasil) de la ciudad de Corrientes. Aquí funcionaba "La Esterlina" (Fotografía de Delia Lugo).


Inmueble ubicado en Roca 1200 (casi esquina Bolívar). Aquí funcionaba la Pista "El Rosedal" (Fotografía de Delia Lugo).


El bar "Media Hora de Suerte" y su rol en la historia del chamamé

¿Qué importancia tuvo el bar "Media Hora de Suerte" en la historia del chamamé? El bar "Media Hora de Suerte" fue un verdadero "refugio" de bohemios y soñadores, cantores, instrumentistas, poetas y amigos que se reunían a saborear comidas criollas o el "picado de butifarra y chicharrón y queso", regado con un generoso y manso vino que aportaba su nutriente de alegría e inspiración para los concurrentes que convirtieron al bar en un "boliche de amistad musiquera", un auténtico nido de encuentros y espacio de contención para sus potenciales audiciones radiales de una época pasada e inolvidable. Como testimonio para el recuerdo quedó plasmado en dos temas musicales, con ritmo de chamamé, que fueron grabados por uno de sus autores: 1) "Media hora de suerte", chamamé de Tránsito Cocomarola y Constante Aguer, grabado en disco Sello Odeón el 21 de julio de 1949 por el "Trío Cocomarola", con el dúo de José Cejas y Manuel Gómez, cantando como solista José Cejas. 2) "Nunca paga", chamamé de Tránsito Cocomarola y Valerio Duarte, grabado en disco Sello Odeón el 13 de diciembre de 1950 por el "Trío Cocomarola", con el dúo de José Cejas y Emeterio Fernández.

El chamamé "Media hora de suerte" es algo más que una obra musical. Es el recuerdo de un centro chamamecero que encierra en su nombre una referencia relacionada con una etapa de la historia del chamamé.


Una anécdota digna de ser contada

Una de las tantas anécdotas que ocurrieron en este lugar de encuentro es la que se refiere a la formación de uno de los grandes dúos que ha dado el cancionero correntino: "Quiroz-Miranda". 
Así fue que en el año 1950, encontrándose el bandoneonista Eustaquio Miño y Alfredo Antonio Miranda en el bar "Media Hora de Suerte", llegó al lugar Gabino Quiroz quien poco después comenzó a cantar. En un momento dado, el maestro Eustaquio Miño pide que formen un dúo entre Quiroz y Miranda. Era su deseo escucharlos juntos. No bien finalizaba de cantar una polka correntina, Eustaquio Miño, con ese donaire tan campesino que lo caracterizó, se dirige a los presentes y dice: “Señores...acabo de encontrar el dúo que estaba buscando. De hoy en más se llama: ¡Quiroz - Miranda!”. De esta forma, Eustaquio Miño convocó a este dúo para incorporarse a su conjunto “Los Gauchos de Mburucuyá” que también integraba el acordeonista Fortunato Fernández. Alfredo Miranda permaneció en este conjunto más de diez años compartiendo actuaciones y grabaciones, mientras que Gabino Quiroz estuvo cerca de cinco años.

Nota: (1) De acuerdo con Gutiérrez Miglio (2007), el trío al momento de grabar este tema (julio de 1949) estaba conformado por Tránsito Cocomarola, José Cejas y Juan A. Ledesma. Sin embargo, en una publicación posterior del mismo autor (Gutiérrez Miglio, 2009), se indica que Juan A. Ledesma se retira del trío en el año 1948 e ingresa Manuel Gómez para formar pareja vocal con José Cejas, aunque ambos no llegan a grabar como dúo. Por lo tanto, consideramos que de acuerdo a la publicación más reciente -referida exclusivamente a la vida y obra de Tránsito Cocomarola- el trío al momento de la grabación de "Media hora de suerte" estuvo formado por Tránsito Cocomarola, José Cejas y Manuel Gómez.



MEDIA HORA DE SUERTE
(chamamé)

Letra: Constante Aguer
Música: Tránsito Cocomarola

Recitado

Media hora de suerte,
upévante aikotevê (1),
esa flor que no la olvido
si no me olvida ha de volver.


Cantado

Por una morena
yo llevo una pena
que en vano pretendo
queriendo olvidar.

Tiene la mujer
duro el corazón,
porque nunca sufre
por una pasión.
Te quieren un día,
te dejan de amar,
y muy divertidas
se van a bailar.

Y nosotros sin consuelo
lloramos el bien perdido,
y en tragos de guaripola (2)
vamos buscando el olvido.

Hasta luego doña Pepa,
hasta luego don Julián...
kuarahy ja osema ouvo, (3)
ja hetama ro farrea (4).

(1) "sólo eso necesito"
(2) "caña con ruda"
(3) "ya está saliendo el sol"
(4) "mucho ya farreamos"



Agradecimientos a:
-Prof. Enrique Antonio Piñeyro (Corrientes).
-Sra. Rosa García de Gómez (Corrientes).
-Sra. Gómez de Lértora, hija de doña "Rosita" (Corrientes).
-Sr. Zambrana, hijo del dueño de la Pista "El Rosedal" (Corrientes).
-Srta. Delia Lugo (Corrientes).
-Sr. Juan Pedro Zubieta (Corrientes).
-Sr. Walter Magnelli (Buenos Aires).
-Prof. de Idioma Guaraní, Sra. Zunilda de Gauto (Asunción, Paraguay).


Fuentes consultadas:
-Fundación "Memoria del Chamamé".
-Gutiérrez Miglio, R. 2007. Quevedo-Maidana y su conjunto correntino en el mundo del chamamé. Ed. El Reino Guaraní. Bs. As. p. 76-77.
-Gutiérrez Miglio, R. 2009. Tránsito Cocomarola, el taita del chamamé, y sus cantores. Ed. El Reino Guaraní. Bs. As. 288 p.

4 comentarios:

  1. QUE MAGISTRAL TRABAJO PABLO, EXCELENTE LOS TITULOS, LAS DESCRIPCIONES, EL ENSAMBLE DE TANTA INFORMACION, REALMENTE MARAVILLOSO, GRACIAS POR TANTO TRABAJO, UN ABRAZO CHAMAMECERO

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  2. Excelente trabajo Pablo, de verdad mis sinceras felicitaciones porque uno lee y es como un cuento, estéticamente impecable y con toda pero toda la información.
    Creo que todos los que visitamos tu blog tenemos que agradecerte muchísimo tu trabajo y tu dedicación porque, es más que evidente, que el llevar adelante este blog te requiere muchísimo tiempo que le restas al resto de tus ocupaciones, a tus amigos y a tu familia.
    Los que visitamos este blog llegamos y ya está todo listo y quizás muchos no lleguen a valorar todo el tiempo y esfuerzo que le has dedicado para que, cuando uno entra a la página, esté todo listo, lindo y arreglado.
    Es como cuando vamos a comer a lo de un amigo y cuando llegamos ya está la comida preparada, la mesa servida y todo listo; y cuando llegamos disfrutamos la comida.
    Por eso, como analogía, cuando nos vamos después de disfrutar la comida decimos gracias, te doy en mi nombre y en el muchísimos seguramente un GRACIAS inmenso por todo lo que haces para llevar al mundo la música y las historias de nuestro litoral.

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  3. Me encanta la historia, está contada prolijamente, un gran trabajo amigo, esto merece varios brindis, salud!!
    Un abrazo fuerte.

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  4. AYER BUSCANDO ÑANGAPIRI DE BLANCA MUNIAGURRIA, ME ENCONTRE CON ESTA HISTORIA TAN CERCANA A MI VIDA SIN SABERLO, YA QUE ES EL BARRIO DONDE YO ME CRIE, GRACIASSS ME ENCANTOOO UN TRABAJO EXQUISITO Y GRACIAS PORQUE ACA ENCONTRE EL TEMA QUE BUSCABA.. MARIA DEL CARMEN

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