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jueves, 15 de septiembre de 2011

Historiando cantares - Cañada Fragosa

Hola a todos.
En este "Historiando cantares" traemos el relato del profesor Emilio José Noya sobre "Cañada Fragosa", chamamé de Julio R. Chapo y Eustaquio Miño.
Dejamos al final, la letra completa del tema y el audio de "Cañada Fragosa" (grabado en el año 1954) interpretado por "Los Gauchos de Mburucuyá" de Eustaquio Miño, y con las voces del dúo Quiroz-Miranda.
Dedicado a la Sra. Segunda "La Negra" Almirón de Lugo, madre de la amiga Delia y enfermera que estuvo al lado de don Eustaquio en sus últimas horas de vida.
Será hasta la próxima.
Pablo

Eustaquio Miño
(Fotografía cedida por Ada Azucena Vallejos)


Por Prof. Emilio Noya

Figura fundamental del cancionero correntino, Eustaquio Miño albergó siempre en lo íntimo de su espíritu el deseo de perpetuar en una composición musical ciertas evocaciones de la adolescencia. Así nace el chamamé "Cañada Fragosa" (La Fonola Chamamecera Selección 78 rpm - Vol. 7), en cuyos versos el poeta Julio Restituto Chapo (1896-1972) refiere los devaneos amorosos del apasionado joven, quien con el arrebato propio de la edad atraviesa las quietas aguas de la misma para visitar a la que sería su futura esposa y madre de diez hijos: Ramona Maidana. Un pingo bautizado "El Mala Junta" fue su compañía inseparable en aquellas aventuras nocturnas, que con frecuencia terminaban con los rayos solares despuntando en el horizonte. Aunque persiste generalizada confusión respecto de su sitio de origen, Miño nació el 20 de septiembre de 1912 en "El Pasito", departamento de General Paz, Corrientes.


La "Cañada Fragosa"
(Fotografía extraída del sitio "Club de Observadores de Aves de Mburucuyá")


La niñez del músico transcurre en el medio rural, donde su padre matiza las actividades labriegas ejecutando aires correntinos con un anticuado acordeón de dos hileras. Esta circunstancia y un hecho fortuito marcaron su destino, en efecto, cierta vez que debe guardar reposo aquejado por una dolencia, se distrae procurando desentrañar los secretos que encerraba el instrumento. Más tarde viaja a Barranqueras y en la ciudad portuaria conoce a Pedro Mendoza, quien le enseña a tocar el bandoneón. Allí se une a un grupo de entusiastas jóvenes, encargados de amenizar los intervalos en cines de barrios con interpretaciones del acervo regional y tangos de la "guardia vieja". Enriquecido por esa experiencia vuelve al medio, instalándose en Mburucuyá.
Con elementos locales decide formar el conjunto "Los Gauchos de Mburucuyá", por cuyas distintas formaciones pasaron valores que luego adquieren notoriedad, pero esencialmente fue un forjador de dúos vocales: Hermanitos Romero, Peregrino-Colman, Vera-Lucero y Quiroz-Miranda. Frecuentes giras por el interior provincial, Chaco, Santiago del Estero y Buenos Aires, donde cumple exitosas temporadas en LS4 Radio Porteña y el "Salón Verdi", cimentaron la popularidad de "Los Gauchos" que llegan a la grabación de placas magnetofónicas en 1954, interviniendo en las mismas los acordeonistas Fortunato Fernández y "Coco" Encinas, el binomio Quiroz-Miranda y Felipe Ferrari (contrabajo).
Pese a que no se lo puede tildar de prolífico, compuso varias piezas de éxitos como sus chamamés "El pasitero", "2 de noviembre", "Don Basilio", "El puestero", "Palo blanco" (cuyo título alude al bastón que emplea el cantor no vidente Alfredo Miranda), "La Querencia" y otras. Bohemio empedernido y generoso gustador de copas en ruedas de amigos ocasionales, fue quemando tragos de su existencia en interminables noches de música y brebajes. Final injusto para quien expuso a lo largo de su tránsito terreno -al margen de incuestionables aptitudes musicales- dotes de modestia y hombría de bien. "El toro buey", como lo apodaban sus allegados, falleció en Mburucuyá el 26 de enero de 1967.


"Los Gauchos de Mburucuyá":
Fortunato Fernández, Eustaquio Vera, Eustaquio Miño y Salvador Miqueri
(Fotografía cedida por Ada Azucena Vallejos)


CAÑADA FRAGOSA
(chamamé)

Letra: Julio Chapo
Música: Eustaquio Miño

En el cofre de mis recuerdos
guardadita llevo la estrella
que alumbró con su luz la huella
que tanta dicha me deparó.

Era noble aquel "Mala Junta",
que así llamaba a mi pingo
doradillo, el flete más lindo
que en la comarca pude lucir.


Recitado

Por la Cañada Fragosa
mi potrillo "Mala Junta"
¡era de menta famosa
y bueno de punta a punta!
Era el noble el parejero
en la cancha, mano a mano
y muy guapo y baqueano
para cruzar el estero.

Estribillo

Por eso yo canto acá
los cuatro amores que tuve,
mi guaina, el potrillo aquel,
Cañada Fragosa y Mburucuyá.

Distraía mis pensamientos
más felices, la bien amada...
y fue entonces que la cañada
con sus encantos me cautivó.


¡Ah, cañada de mis recuerdos!
que a mis años mozos enseñaste
que es más bello aún el contraste
cuando se piensa sólo en amor.



Fuente:
Noya, E. 1989. Historiando cantares. pp. 137-140.

lunes, 14 de octubre de 2013

Historiando cantares - El guazuncho

Hola a todos.
Retomando este espacio llamado "Historiando cantares", dejamos aquí la historia del ya clásico chamamé "El guazuncho", obra musical perteneciente a Adolfo Cipriano "Fito" Ledesma y Ernesto Montiel. El texto fue extraído del libro "Fito Ledesma, el capo del chamamé, y sus cantores", del profesor Roberto Gutiérrez Miglio.
Un agradecimiento al amigo Guido Rodríguez por la corroboración de algunos datos (Guido fue asimismo colaborador del presente libro del profesor Gutiérrez Miglio).
Será hasta la próxima.
Pablo

Adolfo "Fito" Ledesma. 
Tapa del disco "Mis recuerdos" del año 1968.

El chamamé "El guazuncho" lo compuso "Fito" Ledesma mientras tomaba mate, repasaba temas y creaba melodías, en su casa de la calle Pringles 1928, entre Curupaytí y Cervantes Saavedra, en General Pacheco, provincia de Buenos Aires. El nombre del tema se lo asignó doña Sebastiana Esquivel, esposa de Dámaso del Valle y madre de Carmen Esquivel, esposa de "Fito" Ledesma. Allí, en la casa de "Fito" Ledesma concurrían numerosos músicos y ocasionalmente también concurría Ernesto Montiel. Tomaban mate, ejecutaban el acordeón, y entre tema y tema solía escucharse "El guazuncho". Corría ya el año 1965 y "Fito" aún no tenía formado su propio conjunto, en tanto Ernesto Montiel estaba al frente de su prestigioso Cuarteto "Santa Ana". Y ese mismo año lo llevó al disco con dicho cuarteto. Pasó el tiempo, vinieron numerosas grabaciones, "El guazuncho" se convirtió en un tema clásico y en un símbolo de "Fito" Ledesma, que luego con su conjunto lo llevó al disco en cinco oportunidades, en los años 1968 (disco "Mis recuerdos", Sello Asunción), 1980 (disco "Poniéndole el moño", Sello Polydor), 1988 (cassette "Aroma de las gramillas, Sello Leader Music), 1999 (disco compacto "Más capo que nunca", Sello San Miguel) y 2005 (disco compacto "Recuerdos entre amigos", Sello Abraham Helú), en algunos casos con glosas, que nada tienen que ver con el guazuncho, a cargo de Isidro Rodríguez y de "Freddy" Acevedo.

Esas mismas, preexistentes y viejas glosas que "Fito" Ledesma incorporó al "El guazuncho" en el año 1988, ya habían sido grabadas antes en el año 1969 por Ernesto Montiel con el Cuarteto "Santa Ana", en el tema "Polquita de Taragüí", perteneciente a Ernesto Montiel, Ricardo Scófano y Lucas Falcón.

"El guazuncho" también fue grabado en el marco del conjunto de Tránsito Cocomarola por "Fito" Ledesma solo con su acordeón con guitarras, sin el bandoneón del "Taita", en el año 1967.

Cabe acotar finalmente y por otra parte, que el guazuncho es el nombre de un animal, un venado montés de color canela oscuro, y que a él se refiere el nombre que le asignó doña Sebastiana Esquivel, suegra de "Fito" Ledesma, al famoso chamamé.

EL GUAZUNCHO

Gritan gloria los cantares
desde la tierra al confín,
vibra el sonoro clarín
que esparce notas galanas
saludando con su diana
la tierra de San Martín.

Música: "Fito" Ledesma y Ernesto Montiel

Grabado por "Fito" Ledesma y su conjunto en 1968 y 1980 sin recitado, en 1988 y 2005 con recitado por Isidro Rodríguez, y en 1999 con recitado de "Freddy" Acevedo.

Texto extraído de:
Gutiérrez Miglio, R. 2012. Fito Ledesma "El capo del chamamé" y sus cantores. Ediciones El Reino Guaraní, Buenos Aires. pp. 179-180.

martes, 5 de julio de 2011

Historiando cantares - Eterno imposible

Hola amigos.
Continuando con la entrega de "Historiando cantares", traemos aquí el chamaé "Eterno imposible", con los versos de la entrerriana Teresa Scarpetto y la música del correntino Francisco Luis Casafuz.
Quien lo grabó por primera vez fue "Quevedo-Maidana y su conjunto correntino" en el año 1962 y fue cantado por el mismo Casafuz haciendo la 2da. voz y por su compañero de dúo Bernardo "Nene" Fernández.
Dejamos al final, la letra transcripta y el audio del mencionado chamamé.
Será hasta la próxima.
Pablo


Primera formación de "Quevedo-Maidana y su conjunto correntino". De izquierda a derecha: Francisco Luis Casafuz, "Toto" Maidana, Ramón Quevedo y Bernardo "Nene" Fernández. Año 1962.


La entrerriana Teresa Scarpetto vivía en el campo, en la localidad de Basavilbaso (provincia de Entre Ríos) y escuchaba desde allí los programas radiales chamameceros que se transmitían desde Buenos Aires, como "Cartelera Correntina" de Polito Castillo o "Fiesta en el Rancho" de Pirca Rojas. Cuando escuchaba temas instrumentales, escribía versos para esos temas y se los enviaba a los autores de la música para que los incorporaran a ellos, si es que eran de su agrado. Así nacieron chamamés como "Cantar del Paraná" y "Sin tu amor" con música de Ramón Bernárdez, "Pagos del Litoral" con música de Ernesto Montiel o el vals "Mis cantares" con música de Anselmo Luque.
A su vez, también cuando estaba en Buenos Aires, donde luego se radicó con su esposo el acordeonista goyano Sebastián "Cacho" Arriola (1934-1973), concurría a dichas audiciones conociendo a algunos de los integrantes de la embajada de Pirca Rojas. Allí, en el año 1962, conoció a Francisco Luis Casafuz, que dos años antes había integrado dúo con Alfredo Reyes actuando con Isidoro Miño, y el año anterior había formado dúo con Bernardo "Nene" Fernández actuando con el bandoneonista Blas Martínez Riera, antes de que éste ingresara al "Cuarteto Santa Ana". Luego, Fernández y Casafuz se incorporaron al conjunto "Quevedo-Maidana" (Ramón Quevedo y Juan Feliciano "Toto" Maidana).
Es entonces cuando Teresa Scarpetto conoció a Francisco Luis Casafuz en la audición "Fiesta en el Rancho" y le dijo que quería hacer un chamamé para él, ante lo cual Casafuz le solicitó una letra para componerle luego la música. Entonces Teresa Scarpetto le entregó los versos quien se los llevó a su casa, y tal como lo solía hacer para componer sus temas musicales, en el silencio de la noche, se inspiró una vez más para ponerle la música a "Eterno imposible". En efecto, una noche se despertó y se instaló en la pequeña sala de su casa donde tenía su guitarra y sus recuerdos chamameceros, que era el lugar donde normalmente componía la música de sus temas. Y allí, en esa salita de la casa donde vivía en ese entonces, en la localidad de Rafael Castillo (calle Manuel Estrada y Tres Cruces), y en el silencio de la noche, nació la música del chamamé "Eterno imposible" sobre los románticos versos previamente escritos por Teresa Scarpetto.
El chamamé "Eterno imposible" fue grabado en el año 1962, por el conjunto "Quevedo-Maidana", con el acordeón de Ramón Quevedo, el bandoneón de "Toto" Maidana, el contrabajo de Felipe Zurita, y las guitarras y voces de Bernardo "Nene" Fernández (1ra. voz) y Francisco Luis Casafuz (2da. voz) (disco "Baila Corrientes" - Sello Opus OL Nº 7008. Año 1962). Años más tarde, en 1971, también fue grabado por el conjunto de "Fito" Ledesma con las voces de Ramón Morales y Francisco Luis Casafuz.

ETERNO IMPOSIBLE - chamamé

Letra: Teresa Scarpetto
Música: Francisco Luis Casafuz

Mi alma que creía muerta
volvió a sentir el calor
las ansias de darse besos
quemándose de pasión.

Todo nació al conocerte
cual divino amanecer
tus ojos han provocado
con esa luz del querer.

Estribillo

Querida mía no he de olvidarte
siempre en mi alma te llevaré,
eres el sueño inalcazable
de mis delirios y mi querer.

De nuevo mueren mis sueños
como también la ilusión,
el fuego que has encendido
lo apagó tu incomprensión.

Mi vida se vuelve triste
estando en la soledad,
viviré diciendo el rezo
de tu nombre en mi ansiedad.


 
Fuente consultada:

Gutiérrez Miglio, R. 2007. Quevedo-Maidana y su conjunto correntino en el mundo del chamamé. Ed. El Reino Guaraní. Bs. As. p. 71-72.

sábado, 24 de septiembre de 2011

Historiando cantares - Pagos del Litoral

Hola a todos.
Continuando con "Historiando cantares", traemos aquí el chamamé "Pagos del Litoral" de Teresa Scarpetto y Ernesto Montiel que fuera grabado por primera vez por el Cuarteto "Santa Ana" cantando el siempre recordando Roberto Galarza y que en el día de ayer se cumplió el 3er. aniversario de su fallecimiento.
El texto fue extraído del libro "El dúo mayor del chamamé, Ubeda-Chávez y su conjunto correntino" de Roberto Gutiérrez Miglio (Ed. El Reino Guaraní, 2006).
Será hasta otro momento.
Pablo


Cuarteto "Santa Ana" (año 1957): Apolinario Godoy (bandoneón), Ernesto Montiel (acordeón), Roberto Galarza (guitarrón y voz) y Alfredo Alonso (guitarra).


La poetisa Teresa Scarpetto, cuyo nombre completo real es Hiria Teresa Scarpetto, nació en la localidad de Altamirano Sur, departamento Tala, a 30 km al norte de la ciudad de Rosario del Tala, en la provincia de Entre Ríos, el 8 de junio de 1931.

Desde chica, se radicó con su familia en la localidad de Basavilbaso, también en Entre Ríos, viviendo en el campo. En la década del '60 se radicó definitivamente en la ciudad de Buenos Aires. Vivió con su esposo, el acordeonista Sebastián "Cacho" Arriola, nacido en la ciudad de Goya, provincia de Corrientes, el 18 de marzo de 1934 y fallecido tempranamente a la edad de 39 años el 21 de abril de 1973 en un accidente automovilístico.




El acordeonista "Cacho" Arriola, esposo de Teresa Scarpetto.


Cuando Teresa Scarpetto vivía en Basavilbaso en el campo, solía escuchar por radio las audiciones chamameceras, entre otras las conducidas por Polito Castillo y por Pirca Rojas. Su inspiración poética la llevaba a escribir la letra de algunos chamamés que le gustaban y que escuchaba en forma instrumental en esas audiciones. Luego le enviaba por correspondencia la letra al compositor de la obra.

Así y de esta manera, en el campo de Basavilbaso, nacieron muchas de las obras de esta poetisa, como los chamamés "Cantar del Paraná", con música de Ramón Bernárdez, grabada por Eustaquio Miño y sus "Gauchos de Mburucuyá" con el dúo Quiroz-Miranda en el año 1954, y por "Cacho" Arriola y su conjunto con la voz de Oscar Olivera, o el vals "Mis cantares" con Anselmo Luque, grabado también por "Cacho" Arriola con el dúo Giménez-Casafuz, entre otros.

Y también en el campo de Basavilbaso nació la poesía del chamamé que más satisfacciones le produjo, que fue "Pagos del Litoral", con música de Ernesto Montiel. Teresa Scarpetto escuchó por la radio la música de "Pagos del Litoral", y le escribió la letra inspirada en las costumbres de su pago, en particular de un tío suyo, cuya imagen dominguera prácticamente está descripta en este tema. Una vez que terminó de escribir la letra, se la envió a Ernesto Montiel, la cual fue aceptada por el músico. Entonces la obra fue llevada al disco por el "Cuarteto Santa Ana" el 11 de noviembre de 1957 con la voz de Roberto Galarza (disco "Pagos del Litoral"), y nuevamente en 1968 con la voz de "Cacho" Saucedo (disco "La bailanta"), al igual que la grabó el conjunto de "Cacho" Arriola con la voz del chaqueño Alejo Liqueiro (disco "La moda del chamamé"), como así también posteriormente fue grabada por muchos conjuntos más.




Cuarteto "Santa Ana" (año 1962): Lucas Falcón (guitarra y voz), Blas Martínez Riera (bandoneón), Ernesto Montiel (acordeón y dirección) y "Cacho" Saucedo (guitarra y voz).

PAGOS DEL LITORAL
(chamamé)

Letra: Teresa Scarpetto
Música: Ernesto Montiel

Bellos recuerdos invaden mi alma,
mi mente vibra en un cantar
soñando siempre en la dulce calma
de aquellos pagos del Litoral.


Cuánto te añoro suelo querido,
si hasta parece que oigo el trinar
de los zorzales y los jilgueros
rondando siempre aquel lugar.


Estribillo

Flores hermosas
cubren mi tierra
pues ella encierra
todo un caudal.
De mil hechizos
que dio natura,
la esencia pura
del Litoral.


Vivo añorando aquellas tardes
cuando en mi rancho solía cantar
con mi guitarra mientras mi madre
unos amargos solía cebar.


Los días domingos bien tempranito
bien empilchado en mi pangaré
para otros pagos y al trotecito
me iba silbando un chamamé.


Fuente:

Gutiérrez Miglio, R. 2006. El dúo mayor del chamamé: Ubeda-Chávez y su conjunto correntino. Ed. El Reino Guaraní. Bs. As. 80 p.

lunes, 16 de julio de 2018

Teresa Scarpetto - Entrevista

Hola a todos.
Gracias al amigo Rubén Gallinger, quien gentilmente me hizo saber de este artículo, comparto esta entrevista realizada a la señora Teresa Scarpetto, reconocida poetisa y autora entrerriana. Quizás muchos la recuerden por ser autora de los versos del chamamé "Pagos del Litoral", y que posteriormente don Ernesto Montiel musicalizara. El tema fue grabado por primera vez el 11 de noviembre de 1957 por el Cuarteto "Santa Ana" con la voz de Roberto Galarza.
Aquí, la entrevista realizada por Silvio Gorge y Héctor Luis López, a traves de los micrófonos de FM RIEL de la ciudad de Basalvilbaso (Entre Ríos).
Hasta pronto.
Pablo


"EL CHAMAMÉ ESTÁ SIEMPRE EN MI CORAZÓN"



Hiria Teresa Scarpetta, conocida artísticamente como Teresa Scarpetto, es una destacada poetisa y autora, nacida en Altamirano Sur, Departamento Tala, Entre Ríos.


Teresa Scarpetto junto a un ejemplar de la revista "Iverá" en cuya tapa se encuentra su esposo "Cacho" Arriola

Desde temprana edad se interesó por la música del Litoral escuchando audiciones radiales conducidas por Polito Castillo o Pirca Rojas, comenzando entonces a escribir informalmente letras para obras instrumentales que en principio fueron difundidas en los programas de los mencionados realizadores, pero a comienzos de los años '50, las poemas fueron publicados en la revista nativa "Iverá", lo cual marcaría un antes y un después.

Tras vivir la niñez y adolescencia en la zona rural de Líbaros, precisamente en Colonia La Joya se radica en Basavilbaso, en una casa de la esquina de Manzur y 3 de Febrero, hasta que se muda a Buenos Aires, donde conoce al acordeonista "Cacho" Arriola - posteriormente su esposo y padre de Sergio, su único hijo-, quién la relacionó con destacados cultores del género chamamecero.

El miércoles 11 de julio, Silvio Gorge y Héctor Luis López, a traves de los micrófonos de FM RIEL tuvieron la oportunidad de hablar con la creadora entrerriana quién con gran emoción manifestó: "es una gran alegría poder hablar con gente de Basavilbaso, mis pagos, viví muchos años en ese lugar, donde descansan los restos de mis padres y mi marido, porque pensaba volver. Si bien nací en Altamirano Sur, soy un poco de aquí y allá…".

La "Negra" -como le dice con cariño su amiga Teresa Larrosa- era una gran anfitriona -junto a sus padres Solindo Scarpetta y Eleuteria Villaverde, y "Pitina", su hermana- recibía en el comedor "ovalado" de la casona -entre otros- a Tarrago Ros, Mario Millán Medina, Ernesto Montiel y Coco Diaz. "En lo del fotógrafo Mendoza, en Manzur al fondo, era muy frecuente ver a la "Negra" con sus amigos músicos...en uno de esos "viajes" ella me presentó a quien sería su amado esposo, un correntino "churro", al que le pedimos que la cuidara, porque era una gran mujer", contó Larrosa.

"Lo conocí cuando integraba el Cuarteto Esperanza, yo no era muy enamoradiza, pero me cayo bien. Él era muy bueno, por eso murió joven, tenía 39 años. No puedo escuchar sus discos, porque lloro mucho, y así me pasa con todos. Pero el chamamé está siempre en mi corazón…", dice Scarpetto.

Luego al ser consultada sobre sus comienzos Teresa recordó: "apareció en mi vida la revista "Iverá", y me agradó porque a mí siempre me gustó la música del Litoral, comencé a leerla y empecé a escribir sobre lo que leía". Pero entre recuerdos Scarpetto siente gratitud de que "mis chamamés, gracias a Dios, todavía andan bien...siempre me encuentro con gente que me dice escuché -entre otros- "Pagos del Litoral", pero acá en la Capital Federal se pasa muy poco folklore, en la provincia sí…".

Emocionada al rememorar sus años felices en Colonia La Joya afirma: "tengo muchos recuerdos de ese lugar, vivimos mucho tiempo en esa linda casa, pero luego mi padre se la vendió a un tío del actual Presidente de la Nación (Mauricio Macri) y nos fuimos a vivir a "Basso"; les cuento que me habían puesto en la Comisión de la Escuela en la Colonia (La Joya) y llevamos a muchos músicos, pero Tarragó Ros fue una novedad…".

Fue muy emotivo poder hablar con Teresa Scarpetto, la creadora de muchos éxitos, como "Pagos del Litoral", "Cantar del Paraná", "Sin tu amor", "Canción de mis pagos", "Espejos del Paraná", "A Ernesto Montiel", "Mis cantares", "Nací en el pago" y "Sé que volverás", entre otros; títulos compartidos con celebrados músicos como Luis Casafuz, Julio Luján, Ramón Bermúdez, Anselmo Luque, Juancito "El Peregrino", Adolfo Barboza, Eduardo Miño, Carlos Talavera y Ernesto Montiel. Teresa Scarpetto, poetisa y autora entrerriana.

Artículo extraído del sitio web de FM Riel, Basavilbaso, Entre Ríos, Argentina
Domingo 15 de julio de 2018

Nota: Teresa Scarpetto falleció el viernes 5 de abril de 2024, a los 92 años. Desde el año 2020, debido a sus limitaciones motrices, prácticamente no salía de su casa, siendo asistida hasta el último momento por su único hijo.

Para conocer más:
Historiando cantares - Pagos del Litoral
Historiando cantares - Eterno imposible
Cacho Arriola - La moda del chamamé

jueves, 15 de septiembre de 2011

Emilio José Noya - Semblanza

Hola a todos.
Emilio José Noya (1938-2006), el recordado investigador saladeño, fue un amigo de la fiesta "Cuando el Pago se hace Canto", al cual asistió consecutivamente durante 15 años.
Este es el recuerdo de otro saladeño, Elpidio González, que escribió para la revista de esta fiesta que se realiza desde hace 31 años cada mes de enero en la ciudad de La Paz, Entre Ríos.
Por último, es mi deseo que esta publicación sea además un homenaje a quien escribiera innumerables "Historiando Cantares", muchos de los cuales hoy están publicados aquí en este blog.
Un agradecimiento al amigo Carlos "Mange" Casís por el material brindado.
carlosmangecasis@hotmail.com
Hasta otro momento.
Pablo


Profesor Emilio José Noya


Por Elpidio González
(Saladas, Corrientes)


Emilio José Noya: hombre que amó verdaderamente a la cultura del país, de su provincia Corrientes, de su pueblo San José de las Lagunas Saladas. Es aquí donde nació un 12 de febrero de 1938, siendo sus padres don Juan Gabriel Noya y doña Elba Desideria Gil. Fueron sus hermanos Oscar Jesús y Juan Carlos.

Contrae matrimonio con María Ester Gurrera, de quienes nace Juan Gabriel, pero Dios dice basta con la vida de su señora quedando viudo joven aún. La vida continúa, luego se casa en segundas nupcias con Alicia Catalina Pared con quien tienen dos hijos: Emilio José y María Alicia.
Tuvo inclinación por siempre la investigación sobre los músicos populares y talladores de imágenes, ritos católico y paganos, no descuidando por eso sus estudios de abogacía obteniendo el título el 13 de diciembre de 1963 en la Universidad Nacional del Nordeste.
Los conocimientos adquiridos lo coloca en el lugar de hombre de consultas y su forma explicativa y didáctica hace que sus trabajos sirvan para transmitir conocimientos que hoy gracias a él se pueden conocer. Para alcanzar estos logros trajinó por lugares impensados riñendo muchas veces con la ignorancia de la gente o que por vergüenza se negaban al diálogo, toda una lucha, pero Emilio Noya allí estaba una y otra vez hasta lograr su objetivo, que no era otra cosa que el de llegar a la verdad.
La investigación estuvo ceñida a los talladores de Santos Católicos y Profanos, músicos, autores y compositores que, de no ser por él, a muchos de ellos no se los hubieran conocidos porque sus recursos económicos les impedían dejar así su testimonio.
Gracias a Emilio Noya supimos que Alfredo Miranda, un saladeño por adopción músico y cantor, en una grabación hecha por Miguel Repiso, reemplaza a Pedro de Ciervi en el tema "Vuelve corazón", explicando todos los pormenores en torno a la grabación. Simplemente como una referencia.
La vida de Emilio Noya de pronto parece muy fugaz, sin embargo hay toda una trayectoria que va desde su "Historiando Cantares" que comienza el 11 de mayo de 1982. Anteriormente ya tenía otros trabajos, como "Arte Religioso en Corrientes 1977" auspiciado por el "Centro de Empleados de Comercio de Corrientes", más adelante "Sargento Cabral", el saladeño que honró su tierra legendaria.
Colaboró permanentemente con los distintos diarios de la capital correntina: "El Litoral", "Epoca", "El Diario de Corrientes", "Norte" de la ciudad de Resistencia (Chaco), "La Capital" de Rosario (Santa Fe), "Hoy en la noticia" de la ciudad de Santa Fe, "El Territorio" de Posadas (Misiones), "Clarín" de Buenos Aires, "El Diario" de Paraná (Entre Ríos), revista "Temas" de la localidad de Esquina (Corrientes), "Nueva Etapa", "Domingo Savio", "Siglo XXI", "Historia de los Correntinos y sus Pueblos" y "Mirador" de la capital correntina, "Boletín de la Secretaría de Coordinación Popular y Extensión" de la UNNE, "Chamamecero" de Rafaela (Santa Fe), revista del Centro Cultural "Cuando el Pago se hace Canto" de La Paz (Entre Ríos) y "Todo es Historia" de Buenos Aires.
También participó en medios masivos de comunicación: "Ayer Corrientes" audición televisiva de Canal 13 de Corrientes, "El Espejo de mi País" por ATC, y "Revistas Orales", organizadas por las Sociedades de Escritores de Chaco y Corrientes.
Dictó conferencias referidas a imaginería religiosa, folklore musical de Corrientes y la increíble historia de "La Mansión de Invierno", ruinas ubicadas en el departamento de Empedrado a orillas del río Paraná.
Como asesor guionista de Eduardo Gudiño Kieffer en la película nacional "La hora de María y el pájaro de oro". Además su colaboración especial en el libro "Paraná, pariente del mar", editado por el Departamento de Publicaciones de la Biblioteca Popular "Constancio C. Vigil", de Rosario. Fue expositor del VII Congreso Nacional de Folklore, realizado en Córdoba. También como jurado del Festival Provincial del Folklore Correntino en Santo Tomé, Corrientes, jurado del Primer Salón de Artesanías Correntinas Tradicionales y Certamen Literario del P.A.M.I. Corrientes, como disertante en el Simposio del Festival Nacional de la Música del Litoral de Posadas (Misiones) en los años 1985 y 1987, expositor en la Primera Feria Regional de Expresiones Culturales, Artísticas y Deportivas de Posadas, Misiones.
Obtuvo la Primera Mención en el "Certamen Provincial a la Producción Científica y Literaria de Corrientes". Recibió el Primer Premio Argentino por "Mérito de Haber Dedicado una Parte de su Esfuerzo para Defender, Desarrollar y Difundir la Cultura Nacional" (Buenos Aires, 1985). El 26 de septiembre de 1985, la Asociación de Servicios a la Comunidad "Club Pumas Argentinos", al diario "El Litoral" y a su colaborador Emilio Noya, le otorgaron el Premio "Puma Argentino 1984" por difundir la cultura autóctona.


En el año 1990 se reeencontraron Antonio Niz y Francisco "Pancho" Casís, dos figuras históricas del "Cuarteto Santa Ana" de los años '50 y Emilio Noya tuvo el gusto de presentarlos.


Por el reconocimiento a una tarea intelectual que abraza el amor a la tradición y la pasión por la identidad, sentimientos, ambos muy caros a nuestro pueblo, el 19 de julio de 1996 fue distinguido con el "Título de Ciudadano Ilustre de la Ciudad de Saladas", provincia de Corrientes. El 10 de septiembre de 2003, el Honorable Consejo Municipal de Saladas designó con el nombre de "Emilio José Noya" a la calle Nº 6 de Mensura Nº 1419-T del Bº Estación Saladas. Culmina su actividad en la función pública como Director del Museo de Artesanías Folklóricas de Corrientes. En la edición XXI de la fiesta provincial "Cuando el Pago se hace Canto" realizada en enero de 2001 en la ciudad de La Paz, Entre Ríos, le fue entregado el premio "Linares Cardozo" por su aporte a la cultura regional. Cabe destacar que a esta localidad del norte entrerriano, Emilio Noya concurrió quince años consecutivos y su pluma señera siempre estuvo en la tradicional revista del festival.
El 19 de marzo de 2005 fue homenajeado en el "Festival San José de la Música y el Canto" por el Centro Tradicionalista Saladeño "Sargento Juan Bautista Cabral" de la ciudad de Saladas. En esa oportunidad recibió una "Medalla de Oro" donada para tal reconocimiento por el Dr. Ignacio Antonio Iturriz, saladeño radicado en la ciudad de Reconquista, Santa Fe. Felizmente su salud nos permitió rendirle en vida ese humilde reconocimiento y podemos decir que lo hemos visto muy feliz en esa velada que ha compartido, quien diría, hasta altas horas de la madrugada, talvez haya sido su despedida. Casi al año fallece el 14 de enero de 2006.
De esta manera se va corriendo el telón de lo que hasta aquí yo puedo contar, sin dudas que hay mucha tinta en el tintero y el paso del tiempo, seguramente, decantará la obra y la profundidad de sus investigaciones, contando vivencias, anécdotas que hacen a la historias de los hombres y de los pueblos.




"Enero nos deja otro sentimiento nuevo, y otra convicción: en La Paz no hay olvidos. Y acá andará, eternamente, un saladeño, un correntino, que es también tan nuestro. "Emilio" de la inmensa sensibilidad. "Don Emilio" del sentimiento y la alegría de andar historiando cantares, el hombre del gozo pleno en el diálogo pausado y profundo. Y todas las veces enriquecedor. Este Enero que envejece y que se irá, para alcanzar quizás a Don Emilio, ha de llevarse este mensaje de Paz, desde La Paz, y para todos sus seres queridos, para que tengan la certeza de que en La Paz, el recuerdo de este correntino entrañable, fue, es y será imborrable".

Centro Cultural "Cuando el Pago se Hace Canto", La Paz, Entre Ríos.

Fuente:
Revista "Cuando el Pago se hace Canto" - Edición Nro. 27. Pags. 74-76. Año 2007. Publicación anual de la Fiesta Provincial "Cuando el Pago se hace Canto", La Paz, Entre Ríos.
Editor responsable: Centro Cultural "Cuando el Pago se hace Canto".

domingo, 1 de julio de 2012

Historiando cantares - Las Tres Marías

Hola amigos.
Retomando esto que dimos en llamar "Historiando cantares", dejamos hoy la historia del chamamé "Las Tres Marías", compuesto por don Tránsito Cocomarola y que luego el gran poeta Constante José Aguer le pusiera la letra que hoy todos conocemos. El relato fue extraído del libro de Roberto Gutiérrez Miglio "El dúo mayor del chamamé: Ubeda-Chávez y su conjunto correntino" (Ed. El Reino Guaraní, año 2006) y fue enriquecido con información extraída de este mismo blog.
Será hasta otro momento.
Pablo


Constante José Aguer


Constante José Aguer, autor de la letra del chamamé "Las Tres Marías", nació en el porteño barrio de Mataderos, el 6 de abril del año 1918. Falleció en la ciudad de Buenos Aires el 31 de julio de 2010 a la edad de 92 años.

Cantor y guitarrista, además de autor de temas musicales, fue integrante de conjuntos en los primeros tiempos del chamamé en Buenos Aires. Así desde el año 1936 integró el trío típico de Emilio Chamorro, con el bandoneón de Isaco Abitbol, reemplazado en 1938 por Herminio Giménez, grabando discos y continuando una extensa actividad artística desde aquella época inicial.

Además, en el año 1938, el conjunto hacía presentaciones en la matineé de Juan Manuel que se transmitía desde los estudios de radios Stentor, ubicados en la calle Florida 8.

La primera letra de chamamé que escribió Constante Aguer fue la de "Gallo sapukay" sobre la música compuesta por Marcos Herminio Ramírez, continuando con "Puerto Italia", "El transitante" y "Belleza correntina" con el mismo compositor, y "El gateao" con Ramón Estigarribia, entre otras.

El 3 de abril de 1946, el "Trío Cocomarola" grabó el chamamé instrumental "Las Tres Marías" compuesto por Tránsito Cocomarola (disco "Discografía completa Sello EMI-Odeón Vol. 2 - Años 1946-1949"). Participaron de esta grabación el mismo Cocomarola y el dúo de guitarras (y voces) de José Cejas y Juan Alberto Ledesma. Posteriormente el conjunto grabaría -siempre para el Sello EMI-Odeón- dos temas con letras de Constante Aguer, "Belleza correntina" y su clásico "Kilómetro 11". Fue por ese motivo que le entregó la música de ese chamamé para que le escribiera una letra. Constante Aguer solamente conocía con el nombre de "Las Tres Marías", la constelación así denominada, y las boleadoras de tres bolas que son propias para bolear caballos y vacunos que el lenguaje campero denomina "Las tres Marías". Ninguna de las dos acepciones que conocía le parecieron adecuadas para la letra de la composición de Cocomarola y pensó en una letra romántica que se ajustara adecuadamente al espíritu romántico de la obra. Fue así que en su propia casa del barrio de Mataderos comenzó a desarrollar una idea poética, nacida puramente de su imaginación, referida a tres hermanas llamadas María Antonia, María Rosa y María Cristina, y la obra quedó concluida con música y letra, con la aceptación de Tránsito Cocomarola. Poco tiempo después, el 13 de agosto de 1952, la obra fue llevada al disco por Mario Millán Medina con su conjunto cantando a dúo con Celestino Fernández (disco "Mi ponchillo colorado", reconstrucción técnica año 1968).



Mario Millán Medina


En el año 1969, el dúo Ubeda-Chávez grabó el chamamé "Las Tres Marías" con Faustino Rodríguez (acordeón), Tilo Trevisán (bandoneón), Alfredo Alonso (guitarra) y Rito Zabala (requinto) (disco "Mis chamamés más queridos"). Roberto Galarza cantó el tema con el acompañamiento de Isaco Abitbol (disco "En la bailanta"). También Juancito "El Peregrino" y su conjunto en el año 1978, con Alvaro Copello (acordeón), Luis Santa Cruz (bandoneón) y Ramón "Pocholo" Airé (guitarra), grabaron el tema "Las Tres Marías" (disco "El más grande"). En el año 1981, Ramona Galarza con "Los Reyes del Chamamé" (ex conjunto de Tarragó Ros) lo lleva también al disco ("Los Grandes del Litoral - Vol. 2"). Para finalizar, en este blog hay un disco que es una compilación de temas de autoría de don Constante Aguer, algunos de ellos cantados por su propio autor ("Cantares chamameceros").


LAS TRES MARÍAS - chamamé

Letra: Constante Aguer
Música: Tránsito Cocomarola

I

En mi pueblo hay un ranchito
sobre una loma ubicado,
de blanquísimas paredes
y naranjales rodeado.
Allí viven tres hermanas,
las tres llamadas María,
igual que a las del cielo
puso el Creador un día.

II

Una es María Antonia
morocha preciosa,
otra es María Rosa
que es un primor,
pero la más divina
María Cristina,
de la quien espero
sincero su amor.
A ella mi canto
sencillo dedico,
al cielo suplico
me dé inspiración
para que mis versos
conmuevan su alma
y llene de calma
a mi corazón.

I - Bis

En la noche de clara luna
siempre se suele escuchar
de lejos la serenata
que allí le van a cantar.
Muchos allí van buscando
la esperanza de un querer
pero el que allí tenga suerte
quién sabe quién ha de ser.

Bibliografía consultada:

Gutiérrez Miglio, R. 2006. El dúo mayor del chamamé: Ubeda-Chávez y su conjunto correntino. Ediciones El Reino Guaraní, Buenos Aires. pp. 62-63.

jueves, 29 de septiembre de 2011

Historiando cantares - Karai Pujol

Hola amigos.
Continuando con ésto que dimos en llamar "Historiando cantares", en el día de hoy le corresponde al chamamé "Karai Pujol" de Julio Rafael Chapo y Tránsito Cocomarola.
Como ya es costumbre, dejamos al final del artículo la letra del tema de la primera grabación interpretado por el "Trío Cocomarola" cantando el dúo Verón-Palacios y con el agregado posterior de las glosas dichas por el propio autor de la letra, Julio R. Chapo.
Un agradecimiento al amigo Isaquito por el aporte de los materiales musicales.
Será hasta la próxima mis amigos.
Pablo

Nicolás Antonio Niz, Tránsito Cocomarola, Roque González, Simón de Jesús Palacios y Santiago Verón. Año 1958.


Los versos del chamamé "Karai Pujol" ("Señor Pujol") los escribió Julio Rafael Chapo en el año 1958 a pedido de un amigo suyo, sobrino del Dr. Quirce Pujol, que era propietario de la estancia "El Pindó", en la localidad de Tabay, departamento de Concepción, Corrientes. A Tránsito Cocomarola le gustaron los versos e inmediatamente compuso la música.

Es así como la conjunción Chapo - Cocomarola dedican una obra musical para exaltar la polifacética personalidad de este médico saladeño que transitó por la vida con su carácter jovial y cáusticas humoradas. Amigo de gastarles pesadas bromas a sus semejantes, posería un agudo ingenio para aplicar apodos siempre exactos. El profesor Emilio Noya dice "...de entre la bruma de recuerdos de mi infancia, extraigo nítida la airosa estampa de este caballero impecablemente trajeado, cuyos zapatos relucían con brillos de espejos".

Luego de acogerse a la jubilación en el dispensario de Saladas, vivió días de sosiego en su establecimiento rural "El Pindó", donde en el ocaso de su pintoresca existencia protagoniza un episodio que lo pinta de cuerpo entero: al mejor estilo donjuanesco rapta a una adolescente y va a dar con su humanidad en la policía del pago. Digno corolario para un bromista incorregible.

Julio Rafael Chapo fue un educador nacido el 1º de julio de 1898 en Mburucuyá (Corrientes), que no obstante ser la filosofía y las ciencias sociales los verdaderos incentivos de su vocación, recién comienza a escribir poesías a la edad de 50 años y al poco tiempo, en el lapso de un año ya llevaba escrito 400 poemas, muchos de ellos bilingües. Cursó sus estudios primarios y superiores en Corrientes y Capital Federal, recibiéndose de maestro y profesor, respectivamente. Pero, por sobre todo, fue un autodidacta. En 1951 inicia su tarea como letrista de temas regionales, sumando más de un centenar que son musicalizados por figuras de la talla de Tránsito Cocomarola, Ernesto Montiel, Isaco Abitbol, Damasio Esquivel, Alberto Castelar, Armando Ferreiro, Miguel Repiso, Felipe Lugo Fernández, Alfredo Miranda y los hermanos Cejas.

Julio R. Chapo tuvo su propio conjunto llamado "Julio Chapo, el poeta del Litoral", grabando temas con la intervención en el mismo, en algunos casos, de Tránsito Cocomarola, de Isaco Abitbol, de Ernesto Baffa, de Roque Librado González, entre otros grandes músicos, y las voces del dúo "Yaraví" (formado por Do Santo y Cerrutti), en temas como "La carreta", "Linda correntina" y "Declaración", y del trío formado por los hermanos Francisco y Tomás Fernández y el contrabajista Rodolfo Centurión, en "Madrecita mía".

Con dicho conjunto, Julio R. Chapo dejó su voz impresa con sus propias glosas, sus recitados, en temas como "Estampa correntina", "La chajá", "El taita Marola", "El candil", "La barranca", "El lamento", "El chirimbolo", y en el valseado de su autoría "La polvareda", entre otros.

Las glosas y recitados de Julio R. Chapo tienen un valor propio, que debe adicionarse al valor de su obra poética musicalizada a través de chamamés y de otros géneros afines. Sus glosas tienen la virtud de condensar brevemente, y con total exactitud, situaciones típicas, acuarelas camperas o pinturas de personajes, exponiendo a través de las mismas su capacidad de síntesis, que se manifiesta con impecable limpieza de conceptos. En ellas, no hay nada que sobre ni nada falta. Contienen lo estrictamente necesario para transmitir el todo de lo que en ellas desea expresar. Don Julio Rafael Chapo, "El poeta del Litoral", falleció el 29 de noviembre de 1972 en la ciudad de Resistencia, provincia del Chaco.


Julio R. Chapo


El chamamé "Karai Pujol" fue estrenado por el conjunto de Tránsito Cocomarola con el dúo Verón-Palacios en el Salón "Princesa" de la ciudad de Buenos Aires en el año 1958.

A su vez, el 14 de octubre de 1958, el "Trío Cocomarola" lo llevó al disco con el dúo Verón-Palacios, siendo la última grabación registrada en el Sello Odeón por Tránsito Cocomarola, ya que a partir de allí pasó a grabar en el Sello Philips, cambiando la denominación de "Trío Cocomarola" por la de "Tránsito Cocomarola y su conjunto". El conjunto estaba formado por Cocomarola, Roque Librado González en acordeón, Antonio Niz en guitarra, Juan Ayala en contrabajo y el dúo integrado por Simón de Jesús Palacios y Santiago Verón en voces y guitarras. Ese mismo día el conjunto también grabó los chamamés "Hija del campo" (de Héctor Ravarotto), cantado por Verón-Palacios, y "La espuela" (de Tránsito Cocomarola), así como el valseado "Marejada" (de Roque L. González), este último interpretado por su autor y sin el bandoneón de Cocomarola. Estos temas pueden ser escuchados descargando el disco "Trío Cocomarola - Discografía completa EMI-ODEON Vol. 5 (1957-1958)" publicado en este blog.

Existe un dato curioso respecto al chamamé "Karai Pujol". A la misma grabación interpretada por el conjunto de Tránsito Cocomarola y cantada por el dúo Verón-Palacios, le fueron agregadas las glosas de y por Julio R. Chapo. Esto sucedió después de 1958, quizás como una estrategia de marketing del Sello Odeón ya que Cocomarola y Chapo ya tenían mucho éxito en el Sello Philips. Las glosas están dichas antes que comience el tema musical. Esta versión se encuentra disponible para su descarga en el disco "Tránsito Cocomarola - Discografía completa Sello Philips Vol. 3 - Discos 78 rpm (1960-1961)" publicado en este blog y es la que se puede escuchar hacia el final de este artículo. Al respecto, vale realizar la siguiente aclaración: en este blog fue incluído "Karai Pujol" dentro de la discografía de Philips simplemente por una cuestión cronológica, ya que Cocomarola y Chapo ya estaban grabando para este sello, a pesar que fue el Odeón el sello que la realizó.

Una vez grabado el chamamé "Karai Pujol", se convirtió prácticamente en un himno de Verón-Palacios. Es así como después de su primera grabación por el "Trío Cocomarola" con el dúo Verón-Palacios en el año 1958, el chamamé "Karai Pujol" fue grabado nuevamente en marzo de 1964 por el "Dúo Verón-(disco "El dúo Verón-Palacios canta a su ciudad porá" - Sello CBS Nº 8549) con Jorge de la Cruz Balmaceda (bandoneón), Marcos Brígido González (acordeón), Mario Menéndez (contrabajo) y el dúo de Simón de Jesús Palacios y Santiago Verón en guitarras y voces.

También fue grabado el 4 de abril de 1975, cantando el dúo Verón-Palacios, y acompañados por Enrique Cecilio Barbín en acordeón, Juan Bernabé Guerra en bandoneón, y el contrabajista Mario Menéndez (disco "Tengo tu nombre" Sello EMI-Odeón Nº 6854).

Más recientemente, fue grabado en el año 1992 por el "Conjunto Verón-Palacios" (disco "35 años de éxitos del Conjunto de la Simpatía" - Sello Yatay CD Nº 5995) con el dúo de Simón de Jesús Palacios y Juan Carlos Galarza en guitarras y voces, y el acompañamiento de Félix Robledo en bandoneón y Pedro Pablo Gómez "Gomecito" en acordeón.


KARAI PUJOL (chamamé)

Letra: Julio R. Chapo
Música: Tránsito Cocomarola


Recitado

Un amargo tempranito
y apenas apunta el sol,
hacia su estancia al tranquito,
rumbea karai Pujol.


Cantado

El campo aquel se llama Pindó
cerquita el pago de Tabay
junto al recuerdo de sus mayores
Quirce Pujol upépe ovivi.
Buen correntino ko karai
ha ojerokýrö ndokyhyjéi
mante ko péicha ore paitéva
ha chupe hare che apurahéi.


Estribillo

Entre palmares con sus leyendas
bajo la lumbre de algún farol,
hace a las guainas mil y una ofrendas
no afloja nunca karai Pujol.


Los pobladores llegando van,
hoy es el día de marcación
y las bebidas en damajuanas
torýpe alegran más la reunión.
¡Viva don Quirce! se oye gritar
apenas sale a lucir el sol,
¡viva la yerra!, ¡viva las guainas!,
¡viva en la estancia el karai Pujol!



Fuente:
-Gutiérrez Miglio, R. 2006. Simón de Jesús Palacios y su famoso "Conjunto de la simpatía" Verón-Palacios. Ed. El Reino Guaraní, Buenos Aires. 62 p.
-Gutiérrez Miglio, R. 2009. Tránsito Cocomarola "El taita del chamamé" y sus cantores. Ed. El Reino Guaraní, Buenos Aires. 288 p.
-Noya, E. 1989. Historiando cantares. Fundación "Juan Romero", Corrientes. pp. 108-110.
-Piñeyro, E.A. 1996. Tránsito Cocomarola, vida y obra musical. Ed. Sembrando Producciones, Corrientes. 432 p.

martes, 4 de marzo de 2014

Historiando cantares - Mate argentino

Hola a todos.
Continuando con este espacio denominado "Historiando Cantares", le toca hoy el turno al chamamé "Mate argentino" de Salvador Miqueri y Avelino Flores. Y que sirva este relato como un pequeño y humilde homenaje a don Salvador, fallecido el 20 de agosto de 2013.
Hasta la próxima.
Pablo




En el año 1982, Salvador Miqueri, recién desvinculado del dúo Vera-Lucero, esta vez definitivamente, fue contratado para actuar en la Fiesta Nacional de la Yerba Mate que se lleva a cabo en la segunda quincena del mes de julio de cada año, en la ciudad misionera de Apóstoles y distante a unos 80 km aproximadamente de Posadas. Lo contrataron pero con la inexcusable condición de que debía interpretar un tema nuevo alusivo al mate o a la yerba.

Salvador Miqueri aceptó la contratación, pasó el tiempo y llegó el día de actuar en el festival y no había escrito ningún tema relativo al mate o a la yerba. Entonces, fiel a su compromiso, salió de su casa en Mburucuyá con destino a Apóstoles para cumplir con su actuación en una camioneta en la que iba con sus músicos. En ella, durante el viaje escribió los versos del chamamé "Mate argentino" que, con la música de Avelino Flores, comenzaron a ensayar durante el mismo viaje.

Así es como llegaron a la ciudad de Apóstoles con el tema ensayado en la camioneta, en el trayecto entre Mburucuyá y Apóstoles, y lo estrenaron en el Festival Nacional de la Yerba Mate del año 1982. Pero lo que en realidad estrenaron fue la primera parte y el estribillo, porque la letra estaba incompleta ya que no había concluido la correspondiente a la primera parte bis.

Luego, ya escrita la parte restante de la poesía, el chamamé "Mate argentino", con la letra completa, fue grabado al año siguiente en 1983 con su flamante conjunto denominado "Avelino Flores-Salvador Miqueri" (disco LP Sello Jaguar N° 9044 "Sólo rumores"). Participaron de la grabación Avelino Flores en bandoneón, Salvador Miqueri en guitarra y 1ra. voz, Gustavo Miqueri en guitarra y 2da. voz, Nini Flores en acordeón, Rudi Flores en guitarra y Eduardo Alegre en guitarra.

El vuelo poético de Salvador Miqueri en el chamamé "El mate nuestro" surge notoriamente al combinar en su imaginación, el color verde de la yerba con el color verde en forma abstracta al que se le atribuye una de las tres virtudes teologales, la esperanza. Y con esa imaginación creadora surge en el cotexto de su poesía la metáfora, el verde de la yerba que simboliza la esperanzada argentinidad.




MATE ARGENTINO

Letra: Salvador Miqueri
Música: Avelino Flores

De las costumbres genuinas,
el mate gaucho tradicional
constituye en mi Argentina
el gusto típico nacional.

Estuvo siempre presente
con el guerrero junto al fogón,
brindando su fe caliente
en tantas lides de mi nación.

Es el mate costumbre criolla
que trasunta en sus adopciones
el latir de los corazones
que se confunden en amistad.
Sus sabores, reminiscencias
del capanga y mensú sufrido,
acuarela del tiempo ido,
fiel compañero en la soledad.

Trajinando de mano en mano,
mil afectos vas cultivando,
los amigos amalgamando
acrisolados en hermandad.
Dios te puso en mi tierra gaucha
y por siempre has perdurado,
con tu verde has simbolizado
la esperanzada argentinidad.

Mensú: trabajador de las plantaciones de yerba mate o yerbatales.
Capanga: capataz de un yerbatal.



Fuente:

Rodríguez Miglio, R. 2008. Salvador Miqueri y el legendario dúo Vera-Lucero. Ed. El Reino Guaraní. Buenos Aires. pp. 46-47.

jueves, 26 de abril de 2012

Historiando cantares - Ilusión perdida

Hola a todos.
Continuando con "Historiando Cantares", traemos aquí la historia del chamamé "Ilusión perdida" del gran músico y poeta Salvador Miqueri y grabado por primera vez el 16 de julio de 1952 por el "Trío Cocomarola" con las voces del dúo Vera-Lucero. 
Hasta la próxima.
Pablo


Argentino Lucero (Salvador Miqueri)


Las primeras grabaciones efectuadas por el dúo Vera-Lucero fueron los chamamés "Ilusión perdida" y "El huerto triste", y lo hizo en el marco del "Trío Cocomarola", que en realidad era un quinteto, integrado por el dúo, por Tránsito Cocomarola en bandoneón y dirección, por Ernesto Miño en acordeón y por Felipe Ferrari en contrabajo. Uno de esos dos temas iniciales, "Ilusión perdida", tiene letra y música de Salvador Miqueri.


Esta obra, poéticamente, es la expresión de un deseo fallido. Es la falta de concreción de un sentimiento que no pudo llegar a final feliz. Fue en Mburucuyá del año 1952, y la historia nació en la imaginación de un Salvador Miqueri con 25 años de edad. No obstante, en la misma Mburucuyá, una mujer hoy ya de cierta edad, se atribuye públicamente ser la destinataria de esos versos, lo cual no es así, ya que los mismos se basan pura y exclusivamente en la imaginación de Salvador Miqueri.


Los versos del chamamé "Ilusión perdida" fueron escritos por Salvador Miqueri en el negocio de ramos generales de la familia Miqueri, ubicado en la esquina de las calles Belgrano y Berón de Astrada, en pleno centro de la ciudad de Mburucuyá, enfrente de la plaza Mitre. En ese local comercial además de atender al público, Salvador Miqueri en sus ratos libres escribía versos y era, y aún hoy lo es, lugar de reunión donde daba a conocer sus temas nuevos a músicos y poetas, que a su vez llevaban sus temas, que eran interpretados y acompañados con una guitarra ubicada siempre sobre el mostrador disponible para esas reuniones, donde también intervenían hasta los clientes de la casa. En el caso del chamamé "Ilusión perdida", los versos fueron escritos, sobre el mostrador del negocio, en uno de sus momentos libres, al dorso de una boleta, de una factura comercial, de las que utilizaba habitualmente Salvador Miqueri para escribir los borradores y los originales de sus poesías.


La poesía del chamamé "Ilusión perdida" es un reflejo de lo que son los amores juveniles, una ilusión que no se concretó en la realidad, es la sublimación de un sentimiento amoroso, es un amor sublimado. Y fue la primera grabación del dúo Vera-Lucero, efectuada el 16 de julio de 1952 en el marco del "Trío Cocomarola" (ver Discografía Completa EMI-Odeón Vol. 3).


Desde aquellas primeras grabaciones de los chamamés "Ilusión perdida" y "El huerto triste" registradas en 1952 hasta la última de ellas, que fue el chamamé "Reencuentro" llevado a cabo el 12 de septiembre de 1956, el dúo "Vera-Lucero" dejó 20 temas grabados con el "Trío Cocomarola", para el sello Odeón. En dichas grabaciones del "Trío Cocomarola" con el dúo "Vera-Lucero", el conjunto estuvo integrado por el acordeonista Ernesto Miño -luego sustituído por Argentino Toledo-, y con el contrabajista Felipe Ferrari.


En este blog se encuentra disponible la partitura musical (con letra incluída) de este chamamé.


Fuente consultada:

Gutiérrez Miglio, R. 2008. Salvador Miqueri y el legendario dúo Vera-Lucero. Ed. El Reino Guaraní, Buenos Aires. pp. 43-44